De la generación del ’40 tenemos grandes legados, por ejemplo: el rescate del derecho al voto y el buen sistema electoral, obra de justicia social, reformas y un brillante sistema democrático-constitucional.
Los grandes problemas del presente no desvirtúan esa historia y no le restan a la verdad de que el Estado Libre Asociado (ELA) no es colonia, no es problema y funciona. Los resultados de malas acciones administrativas requieren unidad que supere al confusionismo para no tomar rutas equivocadas (no es mejor opción lo cainista, lo extremista y los estilos que originaron la crisis), fortalecer al país mediante el fortalecimiento del PPD con líderes de excelencia (líderes de vanguardia que honren sus bases fundadoras, unificadoras, de calidad humana y de pueblo), y hacer patria en el perfeccionamiento del ELA.
Vivimos tiempos retadores y el país nos necesita a todos. Son tiempos en que más se necesita inspiración fundadora al nivel enseñado por Luis Muñoz Marín y lo defendido por Rafael Hernández Colón, para hacer y consagrar patria. Se necesita creatividad y pleno progreso con equidad. Voy más allá:
Nací en 1966. No viví la gesta fundadora de 1940. Tomé mi decisión política en 1980 sin tener edad para votar. Comencé en la política activa en 1984 y había quien afirmaba que no podía ser Muñocista porque eso era parte de otra generación. También estaba el debate sobre "modernizar" la insignia del PPD en el diseño y quitarle el "Pan, Tierra, Libertad" porque eso se había logrado y había nuevos retos.
Rafael Hernández Colón siempre fue promotor y defensor de la visión y obra de Luis Muñoz Marín. Aún así, desde que Hernández Colón comenzó como líder, hubo quienes trataban de establecer que él no era como Muñoz; unos por realidad, nostalgia o temas ideológicos, y otros para atacarlo. Hernández Colón siempre reconoció que tenía su propia forma de ser y así, hizo patria como él y a la altura de Muñoz. Sin embargo, lo que se interpreta como llamados y luchas, los principios constantes y los cambios, y las transiciones generacionales, son parte de los ciclos y de la realidad de la vida y el mundo.
Lo que he vivido por misericordia del Señor, y el estudio de la historia, me confirman que todas las generaciones pueden ser Muñocistas, y que siempre hay un buen norte en "Pan, Tierra, Libertad".
* Pan se refiere a que no falte el alimento y se fomente al máximo la justicia social.
* Tierra se refiere al derecho al techo y a poder planificar sabiamente el desarrollo del país.
* Libertad se refiere a la libertad integral, que es más que ideología y status político. La libertad de expresión, el disfrute de los derechos, el sistema constitucional y poder progresar y tener una buena calidad de vida.
De hecho, parte de la canción "Jalda arriba" dice: "Jalda arriba hacia el futuro marchará; un futuro de paz, bien, prosperidad".
No hay causas y realidades pasadas cuando se comprenden los valores eternos y las edificantes bases fundadoras. Se entiende mejor lo evolutivo y progresista desde lo que somos. Así, podemos y debemos ser y seguir siendo Muñocistas.
Los Estadistas se fortalecen en José Celso Barbosa y Luis A. Ferré. Los Independentistas se fortalecen en Gilberto Concepción de Gracia. Los Populares, Autonomistas y Estadolibristas se fortalecen en Román Baldorioty de Castro, Luis Muñoz Rivera, Luis Muñoz Marín y Rafael Hernández Colón. Eso tiene vigencia para todas las generaciones, define los verdaderos ideales y realiza el concepto Patria-Pueblo.
Es de suma importancia, fomentar mejor distribución de la riqueza y de las responsabilidades, la descentralización y la municipalización. El país necesita que se logre cumplir a cabalidad, a la altura del siglo 21 con el espíritu innovador del ‘40. Adelante consagradamente en el buen camino.
* “La solución a los problemas multidimensionales que confrontamos comienza por superar esa crisis de valores para librar nuevamente lo que Luis Muñoz Marín, llamó la batalla de la producción, es decir la batalla por el progreso económico. La batalla por empleos y oportunidades. La batalla por la educación para valerse de esos empleos y oportunidades. La batalla para utilizar con sabiduría la riqueza colectiva e individual que se genera con la producción”. –Rafael Hernández Colón
* “Hemos dicho que el Partido Popular Democrático es el partido de todo el pueblo. Y eso no es una frase hueca. Esa es una verdad honrada y tiene toda la sustancia de la realidad...”. –Luis Muñoz Marín
* "Guiados hoy como ayer, por esos ideales, somos el Partido de más larga historia en Puerto Rico. Ningún otro partido ha luchado tanto ni ha hecho tanto por Puerto Rico. A la vez, somos el Partido más joven, porque la juventud de los partidos no se mide por la fecha de su fundación, sino por la intensidad con que las nuevas generaciones se identifican con los ideales que dieron vida a un partido. Y nosotros los populares tenemos un compromiso irrevocable con la democracia, la justicia social, la igualdad de oportunidades y con hacer una prosperidad para este país que sea justa y duradera para todos.
Y hemos venido aquí a reafirmarnos en esos ideales. Como lo hice yo ante el cuerpo presente de Don Luis Muñoz Marín. Dije en Barranquitas aquel día de profundo dolor: ‘Maestro, lucharemos día tras día para mantener la integridad y la dignidad de nuestro pueblo; quemaremos nuestras vidas para que Puerto Rico alcance su gran aurora de justicia. No, los puertorriqueños no te traicionaremos porque frente a las circunstancias más adversas, tú nos enseñaste que tenemos dentro de nosotros mismos la fuerza para superarnos; y en nuestros votos, los instrumentos para canalizar esa fuerza hacia más altas cumbres de progreso y de justicia’.”
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