viernes, 8 de marzo de 2019

El Día Internacional de la Mujer… Una épica de luchas, victorias, jornadas, fe y amor.



El Día Internacional de la Mujer no surgió con poemas, flores y cajas de chocolates. El 1975 fue el Año Internacional de la Mujer y las Naciones Unidas oficializaron el Día Internacional de la Mujer el 8 de marzo. Sin embargo, el origen lleva a unos momentos más convulsos que una reunión en un foro internacional.

Entre los diversos momentos históricos en el tema de reconocer a la mujer, es destacado que el 8 de marzo de 1857, obreras protestaron en una fábrica textil de Nueva York en reclamo de sus derechos y de mejores condiciones de trabajo. Eran sometidas a jornadas arduas de más de 12 horas a cambio de muy poco sueldo. Cobraban menos de la mitad de lo que un hombre por la misma tarea.


Ese 8 de marzo las manifestantes fueron confrontadas por la policía. Marcharon con la frente en alto 15.000 obreras marcharon con el grito de “¡Pan y rosas!”. De la confrontación con la fuerza policiaca, el saldo fue de 120 mujeres muertas. Las Mujeres Socialistas en Estados Unidos conmemoraron por primera vez el Día Nacional de la Mujer el 28 de febrero de 1909.



Los años han pasado y las luchas no han terminado. Una de las vertientes de la lucha para validar los derechos de la mujer, está en las “Flappers”. En el curso universitario, vi un informe muy bien presentado sobre ese tema. Fue la primera generación de mujeres independientes en Estados Unidos en la década de 1920.  Abrazaron las ideas feministas, y optaron por generar cambios en la sociedad.

Las Flappers desafiaron los moldes que transmitían los padres de un rol sumiso para las mujeres. Aprendieron a conducir automóviles, a disfrutar de la música y la vida, a usar ropa cómoda y sensual, a beber y fumar cigarrillo. Fueron vistas como rebeldes, pero en realidad fueron activistas de que los derechos no son solo para hombres.


Es muy bueno que ya no escandaliza que una mujer pueda tener liderazgo, fumar, beber, transmitir alegría, opinar con seguridad y dignidad. En lo personal, no me intimida admirar a una mujer así, sino que me confirma que el verdadero amor armoniza tal energía femenina con la capacidad del hombre que crece en fe, laboriosidad y serenidad. Polos opuestos se atraen y si se explora el tema de la perfecta complementación, el concepto de la salud integral no se encajona en lo de beber y fumar, sino que enfatiza en lo realmente definitorio que es la calidad humana y la capacidad de empatía y mutua visión.

A la hora de la verdad, es propio recordar que el vino es saludable, es elemento de excelencia para brindar, y tiene uso sacramental. Todo lo admirable del vino se une en el supremo ceremonial de fe. De ese dato de fe surge la lección de vida: Con el vino se busca recordar la obra redentora y al hacer presente al Señor, se trasciende al vino. Lo mejor es brindar con una gran mujer. Si ella opta por no beber o no fumar, que sea por motivos de salud y no por criterios puritanos que no funcionan. A la hora de la verdad, lo que hace a buenos seres humanos nace del corazón. 

Las luchas para validar los derechos humanos de la mujer, son de hombres y mujeres. El tema toda a etapas históricas y a generaciones. Se ejemplifica en mujeres destacadas en lo laboral y profesional, en las artes y los deportes, en la ciencia y los conocimientos, en el liderazgo político y religioso, en la ama de casa y en lo educativo, en fin, en todos los roles. El Día Internacional de la Mujer, es buen momento para ser agradecidos con la mujer y honrar a las mujeres que están en el cielo.  


Con el deseo de hacer un texto diferente, en este El Día Internacional de la Mujer, le dirijo un mensaje especial a los hombres y a mi propia conciencia:
·         ¿Cómo está presente la mujer en la primera oración del día?
·         ¿Cómo se hacen valer los derechos de la mujer día a día?
·         ¿Cómo la mujer inspira a crecer en fe y dignidad?
·         ¿Cómo se redefine y maximiza el liderazgo, con la mujer?
·         ¿Cómo se apoya a la mujer para hacer un hogar estable?
·         ¿Cómo es un estilo de vida la lealtad completa pensando en la mujer?
·         ¿Cómo se vive la empatía hacia mujeres en enfermedad, en soledad y en escenarios atípicos y retadores?
·         ¿Cuál es la mayor promesa ante el Creador para que la mujer sea esencial en el gran Proyecto de Vida a vivir y consagrar?
·         ¿Cómo se honra el recuerdo de la mujer fallecida y se hace real el ideal de vida?

En verdad Dios se creció al crear a la mujer. Dios bendiga a todas las mujeres. ¡Que vivan los principios de vida que hacen patria desde la persona, el hogar y lo comunitario! ¡Que vivan y triunfen los principios de vida buscan vivir y consagrar el mayor Proyecto de Vida en el luminoso nosotros!






Madrecita del alma querida: https://www.youtube.com/watch?v=Ee9to7SHKWs
  




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