Es icónica
una foto en que Rafael Hernández Colón abraza a una anciana. Esa foto fue
tomada en 1975, tras el azote de la tormenta Eloísa. En el libro Contra
viento y marea, Hernández Colón explica lo siguiente:
“Al llegar a Utuado, fuimos directamente a la
Urbanización San José, al margen del río Viví, pues sus aguas enfurecidas
habían llegado hasta el techo de las casas de esta urbanización. Allí, una viejecita que había perdido todas
sus pertenencias, se lanzó a mis brazos, y apretó su cara contra mi
corazón. Gaspar Gómez Margenat, mi
fotógrafo oficial desde que yo estaba en el Senado, captó ese momento y la foto
apareció en las primeras planas de los periódicos del país. Al ver la
enternecedora imagen en los periódicos, la gente pensaba que yo estaba
consolando a la viejecita, pero no se trataba de eso. Ella me estaba pidiendo que
me cuidara y que no fuera hacia las amenazantes aguas del río Viví. ¡Así son
las madres puertorriqueñas!”
La
mujer siempre ha sido esencial en las jornadas de Rafael Hernández Colón. En las
campañas políticas fue potenciadora la presencia de la mujer. Por ejemplo:
·
En la celebración del 25 de julio de 1971, la Cruzada
de la Mujer Puertorriqueña al Rescate de Puerto Rico, estableció precedentes.
En la organización del recibimiento a Luis Muñoz Marín en octubre de 1972, la
mujer participó en forma destacada.
·
En la campaña de 1980, el Telemaratón de la Mujer
Popular en el Coliseo Pachín Vicéns de Ponce, desarrolló gran entusiasmo y ahí,
doña Inés Mendoza de Muñoz Marín pronunció el lema de “¡Sin miedo!”.
·
En 1983, hizo historia en Mayagüez la gran Asamblea de
la Mujer Popular. Lila Mayoral de Hernández Colón tuvo una destacada participación
en la organización de mujeres. Tuvo suma efectividad el lema de “Mujer,
endereza a Puerto Rico”.
Como gobernador,
Rafael Hernández Colón hizo valer el valor y el rol de la mujer en el
desarrollo integral del país. Por ejemplo:
·
En el cuatrienio de 1973-76, se desarrolló la más
amplia legislación en beneficio de la mujer. Se creó la Comisión para el Mejoramiento
de los Derechos de la Mujer, y se enmendó el Código Civil para afirmar los
derechos mutuos en el matrimonio.
·
En el cuatrienio de 1985-88, importantes nombramientos
destacaron la confianza del Gobernador en la mujer para la obra de Gobierno,
como la primera mujer Contralora, la primera mujer Secretaria de Estado y la
primera mujer como Juez Asociada del Tribunal Supremo de Puerto Rico.
·
En el cuatrienio de 1989-92, el liderazgo de la mujer
siguió adelante. Como gran muestra, una mujer fue Directora General del
Pabellón de Nacional de Puerto Rico en la Exposición Mundial de 1992 en Sevilla.
Hoy, Puerto Rico
vive tiempos atípicos con retos antes impensables. Es buen momento
para buscar sabias lecciones históricas. Objetivamente, el estudio de la
historia es muy bueno y recomendable; y al mismo tiempo, hay que tener sumo
cuidado. Hoy tenemos realidades nunca antes vistas.
Con toda sinceridad,
es imposible establecer cómo hubiesen obrado los más admirables líderes de
haber tenido que lidiar con una crisis económica prolongada, el éxodo masivo,
la Ley PROMESA, la Junta de Control Fiscal, los efectos de dos huracanes
categoría 5 (Irma y María) y la necesidad de un nuevo modelo de desarrollo
socioeconómico. Eso requiere tener comprensión mayor y al mismo tiempo, la
búsqueda de restaurar con el objetivo de hacer algo mejor a lo que había antes
del golpe huracanado, no le resta valor al estudio de las lecciones de las
etapas en que la Isla logró superarse. Procede valorar raíces, aprender de
forjadores, y enfrentar las nuevas realidades con capacidad salomónica y apoyo
al nuevo liderato.
Recordar
el pensamiento y la obra de Rafael Hernández Colón, es reconocer mensajes con
vigencia y logros que hicieron justicia, crearon empleos, potenciaron la
democracia y sentaron bases de municipalización y descentralización. Destacar
cómo Hernández Colón sigue sirviendo y fomenta lo educativo, es valorar un
legado vivo y creciente. Las lecciones con vigencia de hazañas vividas,
confirman que Puerto Rico puede regresar al buen camino. ¡Hay esperanza!
Vivimos tiempos retadores,
en que más se necesita inspiración fundadora al nivel enseñado por Luis Muñoz
Marín y Rafael Hernández Colón, para hacer y consagrar patria. Se necesita
creatividad y pleno progreso con equidad. En esa jornada, la mujer es corazón
poderoso, sabia sensibilidad y fuerza de amor. Adelante...
·
“…el buen camino nos llevará a la
realización de nuestras metas. No negamos los problemas que tiene este pueblo,
pero confiamos en nuestra capacidad para resolverlos. Miramos las diferentes
aspiraciones que tenemos sobre el status como subordinadas al pleno desarrollo
de nuestro potencial como individuos y como pueblo”. –Rafael Hernández Colón
·
“¿Qué es ideal? Ideal es toda cosa de
bien por la cual se trabaja y se lucha desinteresadamente; ideal es toda cosa
de bien que se concibe en el espíritu, se proyecta hacia el porvenir y recluta
toda la fuerza del alma para que se logre; es toda cosa de bien que incluye la
seguridad de una madre de que sus hijos no van a pasar hambre, y que incluye la
paz en el corazón, y que incluye el techo que cobija al ser humano a su paso
por el misterio de la vida.
Ideal
es todo propósito de bien, que incluye la honda satisfacción de hacer cosas
creadoras con humildad y con fuerza de espíritu, y que incluye el vaso de leche
que fortifica la salud del niño y la serenidad de quien trata de actuar con
justicia y actúa siempre sin pequeñez y sin odio. Ideal es todo propósito de
bien que incluye el pan que no le falte al jornalero después de la oración, que
es su trabajo sobre la tierra, y que incluye el pedacito de tierra que no se
ejecuta y arrebata al labriego. Ideal es
toda cosa de bien, ya sea el alivio del dolor del cuerpo por la ciencia médica
o el alivio del dolor del alma por la buena religión”. --Luis Muñoz Marín
·
“Porque Puerto Rico son ustedes, somos nosotros, Puerto
Rico es todo lo que nosotros hagamos por él”. –Rafael Hernández Colón
·
“Gracias a la mujer de Puerto Rico.
Gracias a la mujer puertorriqueña porque su esencia es dar. Dar todo lo que
tiene. Dar generosamente. Dar todo lo que tiene a los demás; a sus hijos, a sus
maridos, a sus padres, a sus vecinos, al prójimo. La mujer puertorriqueña da,
porque la mujer puertorriqueña es generosa. La mujer puertorriqueña da, porque
la mujer puertorriqueña es fuerte. Porque no hay fuerza más grande que la del
amor. Porque el amor da fuerza; fuerza para todo, fuerza para luchar”. --Rafael
Hernández Colón
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