Hoy 22 de
noviembre de 2012, fue una Gran Vivencia para este servidor el asistir al
Desayuno de Acción de Gracias de la Iglesia Nuevo Testamento de Ponce (obra
pastoreada por los pastores Susana y Carlos Camacho; ubicada en la esquina de
la Calle Villa, frente a la Plaza Las Delicias y la Fuente de los Leones de la
Ciudad Señorial). Es importante dar GRACIAS.
Al
expresar que la vivencia fue Grande y bendecir a Pastores y congregación, no
busco llevar lo espiritual a un mero nivel de propaganda, y no dejo de bendecir
a toda congregación para que impere el Señor.
Considero
que es deber de conciencian y corazón, agradecer un oasis de paz y consagración
real en los momentos que más lo necesitaba. Seamos sinceros:
Vivimos
tiempos en que del mismo modo que hay quienes descubren y reconocen motivos de
gratitud, hay quienes no logran verlos y no merecen recibir más cargas y ataques,
repetitivos mensajes religiosos y clichés, o el libreto de hacer sentir
culpable. Tengamos comprensión y empatía.
¿Hay
quien lee estas palabras que sienta bajones de fe, soledad, azotes de indiferencias,
incertidumbre, dudas y dolores por engaños y decepciones? Reciba que no está
solo, que nadie está exento de sentir lo que siente y que el propio Jesús
enfrente incomprensión y persecución en el mundo, pero nos alienta:
“Estas
cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción;
pero confiad, yo he vencido al mundo”. –San Juan 16:33
Una
acertada respuesta es luchar para no ser consumidos, levantarnos y hacer de la
constante Acción de Gracias, un motor para dar vida a la vida, consagrar lo
logrado, alentar con sabia perseverancia ante lo aún no logrado y tener Fuerza
para no perder el Rumbo de Amor y Luz. Buscar motivos de gratitud abre ojos y
supera todo lo pequeño, irrelevante, intrascendente e inconsecuente.
Doy
gracias por lo vivido y potenciado en la Iglesia. Doy gracias por la vida de mi
madre. Doy gracias por el Damasco; que llama a no olvidar y seguir pasos de fe
y perseverancia, de concienciación y perfeccionamiento. Doy gracias por el
sueño de vivir el cumplimiento de una promesa que llama a no renunciar, por los
testimonios y los milagros que dan luz y son prólogo… Con Acción de Gracias,
Adelante…
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