domingo, 3 de enero de 2021

La alegría no se forza, se fomenta.

En teoría, el tiempo navideño y de llegada de un nuevo año, debe ser de alegría y optimismo. En la realidad, diversos motivos generan genuina tristeza e incertidumbre. 

Ante la tristeza, lo más incorrecto es obligar a sonreír y/o a no llorar. Creer que con fabricar a un grupo cantando o el montaje para una foto se resolvió todo, es un ejercicio de escape, negación y engaño. 

Ante la tristeza, procede hacer todo lo posible con los recursos disponibles, para hacer sentir bien de verdad a quien uno se dirige o ser parte de reales soluciones. Para lograrlo, lo esencial es respeto y dignidad. Algunas formas son:

* Si eres patrono y no puedes dar bono de Navidad a los empleados, por lo menos  da el más generoso aguinaldo posible. 

* Si eres patrono y no puedes dar beneficios a los empleados, por lo menos da el debido receso navideño y los días feriados.

* Si eres patrono y buscas todo tecnicismo posible para no dar bono de Navidad y beneficios, estás robando. Eso también es corrupción. Pídele perdón a Dios y cambia radicalmente para bendecir a los empleados.

* Si eres educador(a) y te maltrataron cuando eras estudiantes, NO sigas el patrón de humillar y maltratar a estudiantes. Ser fuerte y ser irrespetuoso no son sinónimos. Ayudar y maltratar no son sinónimos. Sigue el ejemplo del Maestro Jesús y trata bien a los estudiantes y a todos; crece en humildad. 

* Si estás en roles de consejería, profesional de la conducta humana y salud mental, ministerial, o de dirección espiritual y/o religiosa, NO deshonres a la vocación y a ti mediante el estilo de pretender todo con libretos memorizados, simplismo y clichés. Sigue el ejemplo de Jesús al obrar milagros: Jesús preguntaba y escuchaba, luego oraba, y luego comunicaba el mensaje correcto, único y particular cara cada caso.

* Si estás alegre, da gracias a Dios y siembra el bien con respeto, amor, fe y prudencia. Recuerda que no procede pretender forzar a la persona que finja alegría, ya que eso es más dañino que el dolor que genera dolor. Procede dar el bálsamo particular. 

* Si estás triste, no te sientas mal. Si necesitas ayuda profesional, búscala. Si no hay ayuda adecuada, piensa en lo que te fortalece y no te hace daño, como tener un pasatiempo, hacer ejercicio, leer, o mejor: buscar en oración la fuerza reveladora.

Muchos más ejemplos se pueden dar. Cada conciencia es llamada a profundizar.

Hay una canción que dice: "Cristo es la Navidad Y el que tiene a Cristo, Tiene alegriaa". Esa canción bien intencionada y con acertada letra, se desvirtúa si se usa para no dar la debida atención a quien está en tristeza o depresión, o como medio para hacer sentir culpable y pretender obligar a aparentar alegría. Recordemos que no todos los dolores son por las crisis del presente. Hay que ver que hay casos en que se originan los problemas desde antes. 

En resumen: Hacer inventario de las bendiciones recibidas y los motivos de Agradecimiento siempre es buen paso. Sin embargo, hay casos en que se necesita y procede algo más. Buscar propiciar la acción solidaria y sanadora, es el mayor heroismo. 

Procede recordar que aún estando en oscuridad o soledad, se puede optar por lo heroico. Que ante incomprensiones, se dé el paso de seguir perseverado en el bien. Que la nueva oportunidad de vida sea luminosa al dialogar y comprender, al reconciliar y restaurar, al fomentar la alegre sonrisa libre y sin manipulaciones. Que el nuevo año sea mejor para consagrar algo mejor.

Videos de técnicas ante la tristeza:

Consejos: https://youtu.be/4rpjn6cRV20

Superar: https://youtu.be/KHZ7tM2NkHo

Terapias: https://youtu.be/THwhcHrnnfU










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