sábado, 9 de abril de 2016

Redescubrir al ELA y edificar ahí, es la clave para echar pa’lante.

El Estado Libre Asociado de Puerto Rico es fruto de un admirable y ejemplar proceso; fue bien creado en 1952 como fórmula no-colonial y tiene plena dignidad moral y política. Veamos tres ejemplos de posturas presidenciales salomónicas:
                
·         En el proceso constitucional puertorriqueño, nuevo del aval del pueblo en las urnas, el presidente demócrata Harry S. Truman, firmó la Ley que autoriza la Constitución, expresó: “That act, adopted by the Congress in the nature of a compact, became effective only when accepted by the people of Puerto Rico in a referéndum”.

·         El presidente demócrata John. F. Kennedy tuvo gran amistad con el gobernador Luis Muñoz Marín y sumo entendimiento sobre las virtudes del ELA. El 25 de julio de 1961 emitió un Memorando en que estableció lo siguiente: “Because of the importance and significance of Puerto Rico in the relations of the United States with Latin America and other nations, it is essential that the executive departments and agencies be completely aware of the unique position of the Commonwealth, and that policies, actions, reports on legislation, and other activities affecting the Commonwealth should be consistent with the structure and basic principles of the Commonwealth”.

·         El presidente republicano Ronald Reagan comprendió la gran sabiduría de armonizar la iniciativa para la cuenca del Caribe con mantener la Sección 936. Reagan agradeció al gobernador Rafael Hernández Colón por el apoyo para “promover la democracia y el progreso económico en toda la región del Caribe”. Puerto Rico ejerció un gran liderato en el Caribe en lo cultural, lo industrial y la creación de empleos. En el mensaje de estado de 1988, Hernández Colón informó sobre un crecimiento económico que sigue siendo factor aleccionador. Dijo Hernández: “…hoy trabajan 126,000 puertorriqueños más que en enero de 1985; 29,000 de ellos jóvenes… La pujanza económica se siente en todas partes. ‘La economía --dice el último informe del Banco Popular—‘se halla en estos momentos disfrutando de un apogeo como no se habla presenciado en más de 10 años’. Hemos hecho posible que el Producto Nacional Bruto creciera en 1987 a un ritmo de 5.1 por ciento –mayor que el ritmo de crecimiento de Japón, Alemania, o los Estados Unidos”. Expresó: “El progreso del sector manufacturero del cual Puerto Rico se venía beneficiando desde que comenzó la ‘Operación Manos a la Obra’, tambaleó en 1978 al aprobarse una ley ideológicamente inspirada que limitó los incentivos industriales --y redujo de 15,000 a 7,000 los empleos promovidos anualmente por Fomento. Y nuevamente el futuro de nuestra manufactura peligró en 1985, cuando dos políticos de la minoría entorpecieron la lucha de Puerto Rico por salvar la sección 936 de la cual dependen cerca de 300,000 empleos. Y si algo hemos confirmado en la lucha por el mantenimiento de la 936, es que las agrupaciones políticas responsables nunca deben poner sus dogmas ideológicos por encima de la inapelable realidad. Las supersticiones son siempre nocivas, pero cuando afectan perjudicialmente al destino económico de todo un pueblo, es menester renunciar a ellas, aunque sólo sea como tributo al sentido común, actitud a la que invito a los miembros de la minoría que aún persisten en el error. Les señalo que, en defensa del bienestar de Puerto Rico, se unió al gobierno el sector privado, el sector laboral, la comunidad en general, incluyendo al fundador del principal partido de oposición, y de esa manera ganamos la batalla de la 936, salvando esos 300,000 empleos. Les señalo además, que derogada la insensata ley de 1978 y aprobada una nueva ley de incentivos industriales, que se ajusta a nuestra realidad, hemos logrado inversiones manufactureras por $2,879 millones y 25,000 nuevos empleos industriales en 3 años”.

Nótese en el origen, el carácter de convenio del ELA, con una estructura funcional y efectiva. La actual crisis económica de Puerto Rico fue causada por malas prácticas administrativas del pasado, no por la estructura del Estado Libre Asociado.

Pretender culpar al ELA por la crisis económica y buscar la destrucción de tan buen sistema democrático-constitucional en base a manipular ese tema, es tan irracional, como si en un hogar se pretendiese demoler la casa propia que tanto requirió levantar y edificar, por las fallas administrativas del jefe o la jefa de familia.

Lo que requiera el presente y el futuro, será de bien en la medida que afirme lo correcto, se potencien y maximicen las instituciones que hacen patria, se consagre todo lo mejor y no se caiga en las cainistas tentaciones malsanas. Procede redescubrir al ELA y edificar ahí; esa es la clave para echar pa’lante. Dios ilumine a todos.



No hay comentarios:

Publicar un comentario