Viernes de Película

Hoy es sábado 27 de agosto de 2011 y no sé si es cosa mía o una realidad, pero al despertar hoy, vi el amanecer mucho más brillante que otros. Algo de Dios debe haber en todo. Ayer fue para mí “Viernes de Película” en todo el sentido de la palabra y desde el inicio, ya que celebraba el Aniversario asistir a mi primer servicio dominical en una iglesia evangélica (entiéndase no-católica, en la Iglesia Fuente de Agua Viva que respeto, apoyo y bendigo). Reconozco que no todos han comprendido mis pasos y no he estado exento de crítica y ataque. En parte comprendo la falta de comprensión por mis silencios, porque no es recomendable decir todo a todos. No faltan quienes equiparan el estilo religioso con el político, viendo a quien se mueve a otra congregación como si fuese un “traidor” que cambia de partido. Eso es un error ya que cuando un partido no funciona, no procede seguir ahí. Sobre lo mayor, mi respuesta es que no he cambiado d efe, he crecido en la fe. Veo que hace falta ver, reconocer y entender que en la vivencia cristiana, es infinitamente más lo que une que lo que divide; Jesucristo une y fortalece, lo que divide son los dogmas superables y las interpretaciones humanas que no son más que la Palabra. Como muestra, ese sentido de fe ayuda a enfrentar los problemas familiares y laborales en forma diferente. No somos más que Jesucristo, por lo que no estaremos exentos lo que Él supo enfrentar cara a cara en este mundo. Somos afortunados al reconocer que podemos aspirar a más en línea con el Señor y la Palabra. Ha sido bueno para mí, el comunicar el júbilo por el cumpleaños del pastor Carlos Camacho, que junto a la pastora Susana Cardona, pastorean en plenitud de ser, vocación y fidelidad, la Iglesia Nuevo Testamento de Ponce; y difundir lo de la película en la Iglesia anoche. Ha sido bueno para mí, el celebrar en Metro-Ponce ayer (excelente restaurante ubicado cerca del monumento a la abolición de la esclavitud en la Ciudad Señorial), previo a la película, mi Aniversario de mis nuevos pasos de fe, con el menú de Rodaballo relleno. Ha sido bueno para mí, sembrar ideas en mis espacios de internet como abono para propiciar el crecimiento de lo logrado y la manifestación de lo aún no logrado. Ha sido bueno para mí, ver “Soul Surfer” en el mejor lugar (la Iglesia Nuevo Testamento de Ponce, en donde me congrego en la actualidad con fe, amor, serenidad, agradecimiento y voluntad), en tiempos en que se combinan en mi vida motivos de agradecimiento y motivos de inquietud, y hasta de dolor; ahora más que nunca, sigo adelante. Porque tanto ha sido bueno para mí en la realidad humana y la perspectiva trascendente, no sólo recomiendo la película que tanto ayuda reverdecer y levantarnos, sino que recomiendo el acto de congregación para no dejar de creer y potenciar lo que mejor define a uno, que es lo que se vive. Como he escrito: “De perseverar con fe, amor, visión, honor, valor y voluntad se trata la vida”. Lo vivido es prólogo y ante el Señor, en el propósito de victoria integral y real para consagrar y dar luz en este mundo, tiene que ser realizable el escenario anhelado con el contenido perfecto. Dios ilumine a todos en la Isla del Cordero.