domingo, 19 de agosto de 2012

El mensaje de las urnas


Hoy domingo 19 de agosto de 2012, voté “Sí” para limitar el derecho a fianza (con el razonamiento de que se buscaba dar discreción para limitar el derecho a la fianza en casos que afectan y consternan a todo un pueblo y no se elimina el derecho a la fianza) y “No” para reducir el número de legisladores (con el razonamiento de que procede respetar el mandato democrático del pueblo dado en el 2005 con el 83.4% de los votos por un sistema legislativo unicameral). Ya que la sinceridad facilita la comprensión, reconozco que lo volvería a hacer.



En la campaña del referéndum, para fomentar armonía escribí lo siguiente: “Respeto tanto a los que coinciden con mi decisión como a los que no coinciden con mi decisión”.



Hoy bendigo tanto a los que votaron “Sí” como a los que votaron “No”. Bendigo porque el ideal mayor debe ser hacer de la vida, una causa de amor.



Es clara mi ideología en política y más allá y ojala –por el bien del país- que la celebración de esta noche no adquiera en un futuro sabor a hiel, y fomente una democracia de más justicia e igualdad.



Vi la oportunidad de superar el partidismo y el cainismo para enfrentar al crimen. Es legítimo el mensaje del “No” de rechazo a la actual administración gubernamental. Es triste que se perdiera la oportunidad de corregir una disposición en nuestra Constitución que, más allá de las fallas del sistema y la diversidad de casos, en el nivel de los tecnicismos lamentablemente tiende a beneficiar a criminales y reincidentes. Tiene lógica lo que dijo Alejandro García Padilla, de que Fortuño y Pierluisi le dieron el beso de la muerte a las propuestas enmiendas constitucionales. ¿Cómo hubiese sido el resultado viendo el contenido de la papeleta sin partidismo? Educar bien sobre lo que significa cada ejercicio de votación, es parte del fortalecimiento de la democracia.  



Procede respetar el mandato de las urnas democráticas. De hecho, el PPD surgió para fomentar el voto libre y limpio. Veo que el gran mensaje de las urnas es trascender candidaturas y partidos y aunque difiero del “No” con relación al tema de la fianza, respeto el mandato dado y exhorto a profundizar en el potencial positivo de las alianzas para hacer mejor patria en el Estado Libre Asociado de Puerto Rico.  



Objetivamente, se presenta un cuadro difícil para gobernar, en un país que simultáneamente pide acción en contra del crimen y bloquea las acciones en contra del crimen. Será tarea enorme para el nuevo gobierno Popular Democrático a partir de enero del 2013, gobernar y sobre todo educar, para que sea posible un proyecto de país en que se comprenda que hay derechos y también hay deberes.



Un gran saldo es que tanto los que favorecieron el “Sí” como los que favorecieron el “No”, coincidieron en confirmar que es grande la Constitución del ELA. No perdamos la esperanza de que en su buen tiempo, se logre superar el partidismo y el cainismo para perfeccionar la Constitución y propiciar un mejor país siendo solidarios con tantas víctimas y hogares enlutados.



El líder guía y no sigue la ruta del viento, dirige por el buen camino y no va a la deriva. Eso trasciende lo político al ser aplicable a cada alma en su rol, llamado y perseverancia. Somos héroes al luchar por la vida y siendo solidarios con lo justo y lo correcto. A cada conciencia le toca buscar ser parte de las soluciones.



En la campaña del referéndum, para fomentar paz escribí lo siguiente: “Así, votaré ‘Sí’, pero abogando por la sabia comprensión hacia los puntos válidos de quienes apoyan el ‘No’, ya que para forjar un país más justo, seguro y próspero en todo bien, hay que contar con las mejores ideas de todos”.



Recomiendo que se adopte esa modalidad de dar atención a las buenas ideas de quienes piensan diferente a uno, ya que lo cerrado de los resultados confirma que si no se buscan más puntos de común acuerdo, en el tranque el país no progresa. Procede que además de celebrar, quienes dirigieron efectiva y exitosamente la campaña a favor del “No”, vean que lo cerrado del resultado y la alta abstención, llaman a ser humildes y más importante: llaman a no caer en los estilos de soberbia y arrogancia que tanto se han criticado para así, merecer ganar en noviembre a la altura de lo enseñado por el maestro y prócer de generaciones, Luis Muñoz Marín.



Así, busquemos agradar al Altísimo para que de ahí fluyan las más sabias y constructivas ideas, decisiones y acciones. Dios ilumine a todos.

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