El Síndrome de la Mujer Maltratada se aplica comúnmente a la muer que sufre
maltrato y opta por callar, sentirse fracasada y que no puede librarse, no
busca ayuda y hasta siente culpabilidad. En los peores casos, justifica el daño
recibido y hasta siente una enfermiza y esclavizante dependencia de quien
agrede y humilla.
Considero
que otra manifestación del Síndrome de la Mujer
Maltratada, es cuando el hijo o la hija de una mujer envejeciente, la maltrata,
le impone y no le permite disfrutar de su feminidad; y la envejeciente opta por
justificar, sentirse culpable y obligada a cumplir caprichos ajenos a su
libertad, sana autoestima y bienestar.
Son
crímenes en contra de la dignidad de la persona. ¡NO al Síndrome de la Mujer
Maltratada! ¡No al abuso y Sí a la vida buena! Busca ayuda y tu derecho a ser
feliz.
Mujer: Vive a plenitud. Dios
se creció al crearte; para la buena causa y no para sufrir.
¡Que
se potencie el pleno respeto!
Que
no se olvide que la Ley de Siembra y Cosecha aplica a todos.
Que
se activen todos los recursos existentes para dar debida atención.
Que
quienes deban pedir perdón lo hagan y quienes deban restaurar, así lo hagan.
Que la sanidad real no sea imposible. Eso es amar.
·
“Cuídate mucho de hacer llorar a una
mujer, pues Dios cuenta todas sus lágrimas”. --Talmud
No hay comentarios:
Publicar un comentario