Que no se repita la historia, ¡a defender la democracia!

 

·         1980: El país enfrentaba tiempos de graves injusticias y profunda crisis económica y social. Se publicó en los periódicos el 21 de agosto de 1980, una expresión de 4 prestigiosos ex-jueces del Tribunal Supremo de Puerto Rico, en que advertían que la legislación electoral que se pretendía establecer, no daba garantías adecuadas contra el fraude electoral. Sin consenso y sin garantías contra el fraude, para tratar de prevalecer a toda costa, la administración Romero impuso lo objetado. Ante esa maquinaria, el PPD triunfó y logró el control de la Legislatura y la mayoría de los municipios. Los resultados de la Gobernación siempre quedaron en entredicho.

                          

·         2012: Nuevamente el país enfrenta tiempos de graves injusticias y profunda crisis económica y social. Nuevamente un gobernante republicano busca CONFUNDIR ante el sentir del pueblo y el auge del PPD. Nuevamente el gobernante de turno, ahora la administración F que sacó F, ha trasteado con el sistema electoral, para tratar de prevalecer a toda costa y sin respeto a la democracia. Como agravante, están en la línea de privar del derecho al voto; tal como para el ’40 los republicanos fomentaban la compra del voto y el encierro de electores, y para el ’80 buscaban eliminar los Pavazos. Ahora invalidaron los Pivazos porque no respetan el principio de la intención del elector y tratarán de invalidar más votos.

 

Existe la alternativa para canalizar la indignación efectivamente y renovar la esperanza: Dar poder forjador al voto en la columna del PPD. Ante el reclamo del voto inteligente para lograr lo mejor para el país, procede ese voto sabio con el voto íntegro debajo de la Pava en las tres papeletas porque es la columna del pueblo en que el pueblo mismo y los méritos definieron las candidaturas. Será el mandato de fe, paz, amor y valor, para que se asuman bien las responsabilidades, se rescaten valores y se adelanten las prioridades e iniciativas que hacen patria. 

 

La democracia se valida con la campaña de respeto a todos y de consideración a la dignidad e igualdad humana; y se protege con el trabajo electoral. Saludo al Equipo Electoral Popular que deberá estar a la altura de lo fundado por Muñoz Marín. Con el voto sabio, libre y limpio se hace patria e historia. Ante la amenaza del fraude electoral que sería contra todo un pueblo: ¡A las trincheras de lucha democrática a defender la voluntad de fe, cambio y restauración; a defender el Voto de la Nueva Esperanza!