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“…hay fuerzas más
grandes que el producto económico total de un pueblo; esas fuerzas son: la
pasión de la justicia y la grandeza de las almas”. –Luis Muñoz Marín
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“Mi administración no será la responsable
de esta degradación, pero me hago responsable de sacar al país de ella”.
–Alejandro García Padilla”.
Mucho se habló sobre la injusta degradación del crédito de la Isla, sobre
la necesidad de unidad y creatividad de pueblo para restaurara al país, y sobre
el tema de la emisión de bonos. En lo inmediato, lo más que se necesita es
consagrar cada día y hacer todo lo mejor posible, con productividad y sin
cainismo.
La Biblia exhorta a orar por las autoridades, por lo que en la jornada
jalda arriba de crecimiento integral y edificación, procede el entendimiento de
que el país nos necesita a TODOS y a ninguna causa particular o ideológica, le
conviene un país dividido, en lucha contra sí mismo y en ruinas.
Ahora más que nunca, procede hacer Patria-Pueblo. Ahora más que nunca procede
seguir apoyando los positivos y heroicos esfuerzos del Gobernador, Legislatura,
alcaldes, funcionarios de gobierno y todos los llamados desde los diversos
roles ciudadanos y de fe, para hacer y consagrar patria. Ahora más que nunc a procede
hacer de cada paso gigante, un enorme motivo de unificación y fortalecimiento.
Porque TODOS somos hijos de Dios y la
Equidad es buena y agrada a Dios, Dios ilumine a todos
en la vida como sabia, perseverante y victoriosa causa de amor.
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“El que siente la
grandeza de Dios en el universo siente también en su propio espíritu la
necesidad de vivir los breves años de la vida en una forma que sea digna del
amor de Dios. Para vivir en forma digna de la grandeza infinita de Dios hay que
llevar generosidad en el espíritu, justicia en el propósito, cariño a los demás
seres humanos en el corazón.” –Luis Muñoz Marín
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“Venceremos el problema
que nos agobia. Que ningún puertorriqueño vea a otro puertorriqeño como su
adversario. El problema que confronta Puerto Rico es el adversario de todos.
Luchemos todos por vencerlo, cada cual en la forma que crea la más honrada y
más sabia – sin agredirnos con pequeñeces y por pequeñeces. Que tengamos la
claridad de espíritu para entender el problema, la fuerza de voluntad para
trabajar en resolverlo, la honradez para hacerlo sin demagogia: ese es mi
ferviente deseo para mi pueblo en este tiempo en que tenemos que salir de la
rejoya, pasajera pero trágica, para poder emprender una vez más la jalda que
nos lleve a nuevos y mejores caminos de creación y justicia y de buen saber
humano y de buen saber puertorriqueño”. --Luis Muñoz Marín
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