La dieta y el
ejercicio son combinación perfecta, pero no son todo. Es esencial una sana
conciencia y un buen corazón. En muchos casos, hay estereotipos del término
“belleza” que no siempre tienen acierto por ser fabricados. Lo más admirable
supera patrones y rompe moldes. La constante es que Dios se creció al crear a
la mujer. Demos gracias por las damas que redefinen y perfeccionan la hermosura.
La obesidad es
otro de los temas que se ha tergiversado mucho. Hay quienes discriminan en
contra de la persona obesa y hay quienes pretenden glorificar la obesidad. La
realidad es que el tema toca la autoestima, la genética y el metabolismo. Lo
cierto es que la obesidad tiende a enfermedades. Dieta y el ejercicio no son
vanidad, son honrar en el tiempo de la existencia, la responsabilidad de cuidar
ese hogar corporal del espíritu.
Hay quienes
nacen con una constitución física. Hay quienes tienen metabolismo lento. Hay
quienes se descuidan por comer y/o beber en exceso. La realidad objetiva es que
el peso que aumenta en forma desmedida, hace daño a la salud; pero también hace
grave daño el perder peso en forma desmedida. Se necesita balance y acentuar el
brillo especial y único de cada alma.
Sobre
autoestima y aceptación, ciertamente es cruel cuando ocurren burlas y discrimen
en contra de la obesidad o la delgadez. Sin embargo, igualmente censurable es
buscar glorificar la obesidad al tergiversar y deformar el contenido de
Proverbios.
Es importante ver
que el contenido de Proverbios sobre “la mujer virtuosa” nos recuerda que no procede
olvidar la humildad y la justa capacidad valorativa; y el contenido de Cantares
recuerda a hombres y mujeres que lo admirable y el cuido y fomento de la sana
autoestima da nuevos niveles al amor y redefine mejor mucho. El relato de Ester
nos recuerda que la belleza, la buena salud y los talentos son de Dios.
Recuerdo lo
triste que era cuando en la clase de educación física, se mantenía en las
gradas a los obesos y con limitaciones físicas, ya que el factor competitivo
excluía a quien no tenía rapidez. Ojala que eso ya no ocurra, ya que el
concepto de fomentar el ejercicio y la actividad física debe incluir a todos;
en especial a quienes tienen dificultades, para fomentar empatía y ser buenos
seres humanos.
Es importante
consagrar talentos y promover la salud integral en que se superen tanto la
obesidad y sus aspectos negativos, como los estereotipos sobre la imagen
“ideal”. Que cada alma busque su estado óptimo que da vida a la vida; y porque
la diversidad es parte de las maravillas de la creación, si en ese estado
óptimo hay unas libras de más, que haya amor, comprensión y aceptación, y no
pequeñeces y exclusión.
Ya que la
sinceridad facilita la comprensión, reconozco mi gran admiración a la gran alma
con dones, belleza inenarrable, energía, llamado único y presencia sin igual
con el nombre artístico de Melina León. Melina me confirma que Dios se creció
al crear a la mujer, que poderoso es el Corazón de Mujer, y que hay destellos
de perfección en la creación; en su abarcadora salud que acentúa tantos
sublimes detalles, confirma que se glorifica al Creador al buscar testimoniar
lo que mejor inspira y edifica.
Felicito a los
promotores de salud y a las almas perseverantes; que no sean imposibles los testimonios
de crecimiento y realización que rompen moldes y perfeccionan mucho, al
establecer nuevos y mejores paradigmas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario