Las mayores obras y hazañas
comienzan en el salón de clase. Apoyar los procesos educativos, es sabio,
heroico y constructivamente revolucionario.
Gracias por unir a tantos en forma
histórica y ejemplar en una Gran Alianza Educativa. Eso es fe y cristianismo de
verdad y en acción.
El educar sobre lo edificante y
equitatino, promueve el orgullo patrio y confirma que una buena administración
sabe invertir bien y promover lo justo, correcto y salomónico.
La presencia de la Alcaldesa es gran
aliento por el luminoso testimonio de ella, y vivo recordatorio de que la real
consagración forja mucho y es ella ángel de la Capital y la patria entera.
¡Adelante en el buen camino!
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"La educación, como la luz del sol, puede y debe
llegar a todos”. --José Pedro Varela
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