miércoles, 3 de diciembre de 2014

Que no se tergiverse el caso de Almolonga para justificar estrategias de manipulación, cainismo y fanatismo en Puerto Rico.

Existe la estrategia de mercadeo tradicional de fabricar testimonios o buscar lejanos lugares como “evidencia” para vender productos e ideas.
No es de sorprender que ciertos líderes religiosos, tomen el ejemplo del  Municipio de Guatemala llamado Almolonga, para proyectarlo como testimonio de crecimiento y progreso cuando “más del 90% de la población entregaron su vida al Señor”.

La idea es abonar a la teoría de que Puerto Rico “le da la espalda al Señor” al fomentar equidad en la base de que todos somos hijos de Dios. Quienes buscan eso tan ilógico, invocan extremo puritanismo para unos temas, pero ignoran otros pecados, como la corrupción que involucra dinero.  Son los que fomentan ciega humillación y estilos de cainismo, maltrato, grito impositivo y exclusión.

Afortunadamente gracias a la nueva tecnología, lo que antes era lejano, ahora se puede verificar con facilidad. Aunque se hable de mejoras económicas en Almolonga y hay estudios que establecen que “la calidad de vida de los habitantes de Almolonga se clasifica como muy alta” esos mismos estudios indican que “contrasta con el nivel de pobreza que aún subsiste, la falta de oportunidades educativas, el crecimiento urbano desordenado, desigualdades entre hombres y mujeres y condiciones insalubres del municipio”. Un informe de Naciones Unidas confirma que siguen serios problemas de pobreza y desigualdad (“tanto en relación con los ingresos de que disponen los hogares, como en las condiciones de vida”), y de violencia a nivel de país.

No es de sorprender que ese cierto liderato religioso que se opone a la equidad en Puerto Rico, enaltezca un testimonio que fomenta la falta de equidad entre hombres y mujeres. Ciertamente la entrega al Señor es algo personal y sublime, NO es someterse a alguien. Lo más recomendable es aprender de los mejores tiempos de Puerto Rico.
Los tiempos de mayor progreso y justicia social en la Isla, se destacaron por el fomento de la educación y la capacidad de superar el fanatismo político y el fanatismo religioso para coincidir por el bien del país (el mejor ejemplo está en cómo Luis Muñoz Marín y Luis A. Ferré lograron ponerse de acuerdo para hacer realidad nuestra Constitución).

Eran tiempos en que se fomentaba el orgullo puertorriqueño en el ELA. El presidente Dwight  Eisenhower expresó en Puerto Rico:
·         “Puerto Rico es verdaderamente único.  Nos sentimos felices de que Puerto Rico sea un Estado Libre Asociado autónomo, orgulloso, unido a los Estados Unidos por propia decisión. 
Esta Isla en las aguas del Caribe, entre dos grandes macizos continentales, ha sido fecundada por dos poderosas corrientes de la historia, enriquecidas por dos grandes tesoros de la cultura.
Con ellas Puerto Rico ha dado forma a su propia manera de vida mezclando lo mejor de lo viejo y de lo nuevo.
Su programa de desarrollo, cuyas raíces son la confianza propia, la ayuda propia, el propio logro, han causado tremendo interés en cada área del mundo libre. Y para otros pueblos que ahora luchan por realizar sus aspiraciones y ambiciones, el Estado Libre Asociado de Puerto Rico ha demostrado que el valor, la persistencia, la fe en los hombres y en el destino que Dios le ha dado, pueden abrir caminos a través de barreras y obstáculos que pudieran parecer insuperables.
Ustedes han hecho para el Estado Libre Asociado un record de logros en que muchos otros pueblos alrededor  del  mundo han encontrado experiencias e inspiración”.

En el periódico “El Mundo” del 28 septiembre 1966, se dice: "El congresista republicano Frank T. Bow, expresó que no cree que el progreso logrado por el Estado Libre Asociado pueda ser igualado en parte alguna del mundo". Para ese tiempo, el crecimiento económico de la Isla era de alrededor de un 10% anual. La entrega a Dios en ese tiempo, era real y humilde, y no sujeta a los estilos equivocados.

Lo que dio al traste con eso, fue el cainismo y el fanatismo. Fue precisamente tergiversar lo de “humillación”, invocar extremo puritanismo para unos temas e ignorar otros pecados como la corrupción que involucra dinero, y menosprecio de lo patrio, lo que desvió al país del buen camino e insiste en ese rumbo.

El país NO le ha dado la espalda a Dios. Quienes le han dado la espalda a Dios son quienes se desvían de honrar la vocación de mayor consagración por otras agendas. Ante los problemas del país, se necesitan soluciones salomónicas que infundan paz integral. ¿Humillación y sumisión?; al empleo de esas palabras para manipular, la respuesta debe ser NO, NO y NO. Porque Dios emplea los medios que Él desea para responder, obrar y edificar, cada persona que opta por hacer y sembrar el bien, es instrumento de Dios y canal de bendición.
                                                                             
Afortunadamente no todo el liderato religioso falla en esa forma y por eso es importante orar para que quienes estén ante las congregaciones, NO se dañen, NO dañen y fomenten la plena abundancia de todos en línea con la Palabra y la sana doctrina cristiana. No es tiempo de humillarse, sino de levantarse, reverdecer y restaurar; es en esa ruta que se encuentra Puerto Rico.

El país se va salvando día a día desde la decisión de cada alma de aportar a la paz y la armonía. En vez de ayunos y eventos manipulados, se necesita fomentar la oración y el ayuno con sabia conciencia; el sentido cristiano que es acción social, perdón y concordia, apoyo a los esfuerzos humanos y salomónicos (en lo gubernamental, el sector privado, lo comunitario y todo foro), búsqueda de tolerancia ante la diversidad y genuinas expectativas de bienestar. Se confirma que se necesita introspección y real humildad en la vida como causa de amor. Dios ilumine a todos.
                                                                 



No hay comentarios:

Publicar un comentario