viernes, 25 de septiembre de 2015

Hay Esperanza…

Hacer patria no armoniza con cainismo, y la buena lealtad partidista e ideológica es no caer en estilos extremistas. Siempre son admirables y aleccionadoras las hazañas de los jíbaros y forjadores que hicieron patria. Siempre tiene vigencia lo enseñado por Luis Muñoz Marín y defendido por Rafael Hernández Colón. Son encomiables quienes siguen la ruta de constructiva conciencia aliancista y de potenciar al país.
                     
Desde la tolerancia y el respeto a la diversidad se puede mucho. En lo mejor de las bases que dan vida al movimiento de pueblo y en cómo se explica sobre lo correcto, está la mejor lealtad a Puerto Rico y a los valores fundadores.

Los relatos bíblicos destacan el poder de restauración con Nehemías. Las crónicas de la ruta puertorriqueña confirman que se ha logrado superar retos cuando se vivifica la fe con obras y se afirman los propósitos de justicia social y progreso con equidad.

Ante los desafíos del presente, que no domine la tentación de cometer errores como los alemanes seducidos por el mensaje hitleriano en tiempos difíciles. Que se logre un claro entendimiento sobre las causas de los problemas y las reales soluciones.

Que se comprenda que el sistema democrático-constitucional de Estado Libre Asociado funciona; y que la mejor forma de potenciar ese sistema en cada área vital, es en su estabilidad y en el perfeccionamiento constante mediante la buena dirección de gobierno, la atención a los consejos sabios y la buena obra cotidiana y consagrada. Ante escenarios antes no visualizados, resurjamos desde lo mejor de nuestras raíces con visión, patriotismo y la acción que une y edifica a generaciones. ¡Hay Esperanza!

·         “La historia nos enfrenta al futuro desde una perspectiva única. Somos puertorriqueños por esencia, por entronque de pueblo. Somos, a la vez, ciudadanos de los Estados Unidos de América. Nuestra identidad se ha formado en esta isla madre, forjadora de nuestro carácter, hecho en su clima, y sensibilizado por sus paisajes. Nutrida por nuestra historia, por nuestras costumbres y tradiciones, la puertorriqueñidad nos da el perfil de pueblo ante el mundo”. –Rafael Hernández Colón








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