Lecciones con vigencia de una jornada primarista en 1984 en Ponce.

Tal como ocurrió a nivel Isla, el Partido Popular Democrático (PPD) perdió por primera vez en Ponce en 1968. En las elecciones de 1972 el PPD recuperó el control de la Alcaldía con el liderato de Luis A. “Wito” Morales y por haber sido un resultado cerrado, el Partido Nuevo Progresista (PNP) retuvo el control de la Asamblea Municipal. Eso dio como resultado un cuatrienio de tranque y la derrota electoral de 1976 impactó mucho.

Aunque Wito Morales fue uno de los mejores Alcaldes de la historia de Ponce, los issues adversos al PPD tuvieron impacto también en los municipios, no hubo una agresiva campaña y al haber solo una papeleta, no se facilitaba el voto mixto. En las elecciones de 1980, el candidato a Alcalde, Carlos Vélez Valentín perdió por un margen mayor que el dado en 1976. Ante eso, procedió de inmediato una reorganización.

Rafael Hernández Colón regresó a la Presidencia del PPD en 1981 y en ese año, nombró a Rafael “Churumba” Cordero Santiago como Delegado Presidencial para el proceso de reorganización. Fue un admirable y ejemplar proceso. Eventualmente, el doctor Enrique “Coco” Vicens llegó a la Presidencia del PPD al prevalecer en asamblea de delegados ante el licenciado José “Cheíto” Méndez Moll. Coco Vicens formalizó tres compromisos:

Completar la reorganización.

Conseguir un local para el Comité Central Municipal.

Conseguir un candidato a Alcalde.

Se completó la reorganización y el Comité sigue hasta el presente en un muy buen lugar en la Calle Guadalupe esquina Atocha. Sobre la candidatura a Alcalde, un titular del periódico “El Vocero” del 11 de enero de 1984 lo decía todo: “Difícil escoger candidato PPD”. Al conseguir al doctor Raúl Ramírez como candidato a Alcalde, Cheíto Méndez Moll y Vélez Valentín insistieron en formalizar un reto de primarias y ahí comenzó una de las más intensas luchas primaristas de la historia.

En ese proceso primarista, conocí a Roberto Cruz y a su entonces esposa Aida Gautier. En el periódico “El Mundo” del 14 de junio, se informó que en las primarias llevadas a cabo el 10 de junio de 1984, los resultados (según el reportaje) fueron:

Raúl Ramírez----------------5.945

José Méndez Moll----------3,363

Carlos Vélez Valentín-----2,718

Aunque el margen de triunfo de Ramírez no dio margen para un recuento de votos, ante la petición de recuento, Raúl Ramírez accedió a que se llevara a cabo dicho recuento para afirmar la validez del mandato de las urnas y fomentar la unidad del Partido. En el periódico “El Nuevo Día” del 16 de junio se informó que se daba por descontado que tras el recuento, se ratificaría el triunfo de Ramírez con sólida ventaja. En el periódico “El Nuevo Día” del 17 de junio, el titular lo dice todo: “Certifican la victoria de Ramírez”. Los resultados finales (según el reportaje) fueron:

Raúl Ramírez----------------6,039

José Méndez Moll----------3,432

Carlos Vélez Valentín-----2,694

En el periódico “El Mundo” del 18 de junio se publicó que el candidato a la Gobernación, Rafael Hernández Colón, pidió la unidad y el trabajo en conjunto de los Populares de Ponce. Objetivamente, no todos se unieron, pero ciertamente hubo un proceso grande para dialogar y tender puentes. En el periódico “El Nuevo Día” del 19 de junio se publicó que Ramírez comenzó reuniones con dirigentes de los candidatos que no prevalecieron para fomentar paz. Aprendí de eso, que luego de las primarias, les toca a quienes prevalecen ser humildes y buscar soluciones salomónicas.

Paralelamente, se iba desarrollando el trabajo de base. Fue la primera vez que participé en una campaña política y siempre recuerdo lo bien que quedaban las caminatas. El trabajo de Roberto y Aida fue dedicado en la urbanización Villa Grillasca, en equipo con más voluntarios (en la campaña primarista, hubo un anuncio de apoyo del liderato de base a Raúl en que apareció el nombre de Roberto Cruz), y en la recta final de la campaña (cuando los candidatos tienen que ser bien selectivos en los calendarios para maximizar cada minuto disponible), Hernández Colón hizo una caminata en dicha urbanización que tiene su nombre en honor a Andrés Grillasca (quien fue gran Alcalde de Ponce por el PPD) el 16 de octubre con Raúl Ramírez, el candidato  a Comisionado Residente, Jaime Fuster, y los candidatos de una excelente papeleta hecha por el pueblo mismo en la primaria que contó con buena participación. Fue un notable acierto.

Ese 16 de octubre, Hernández Colón comenzó su mensaje así: “Buenas noches. Compañeras y compañeros. Compueblanas y compueblanos ponceños. Como hablábamos en el mitin del pasado sábado, que quedó tan extraordinario, ¿verdad que quedó bueno?, esta campaña hay que seguirla, día tras día, mañana y noche, y cada minuto, hasta alcanzar la victoria el día 6 de noviembre. Y por eso me complace tanto que sábado, estábamos en ese gran mitin, allá frente al hospital de Wito, y hoy estamos aquí en Villa Grillasca, en esta tremenda caminata, y mañana ustedes tienen que seguir, y seguir, ahí, ahí, ahí, hasta que esa victoria sea nuestra aquí en Ponce”.

En el resultado electoral de 1984 de victoria para el PPD, Hernández Colón ganó por primera vez en Ponce, pero el candidato a Alcalde perdió por poco más de 200 votos. En el cuatrienio de 1985-88, se implantó el Plan Ponce en Marcha y la Isla vivió un gran tiempo de restauración y de recuperación económica. En 1988 el PPD volvió a prevalecer gracias a la buena obra de gobierno. En esa elección, en Ponce, Churumba Cordero fue electo Alcalde y Roberto Cruz fue electo Legislador. Tienen vigencia las lecciones de la primaria de 1984, que influenciaron en la jornada de 1988 y trascienden:

·         Ponce tiene un rol determinante en la historia.

·         El liderato se hace en la realidad cotidiana y se pule con fe y perseverancia.

·         Lo ideal es el consenso para elegir candidatos; hay derecho a primarias, pero mayor es el análisis de experiencias y resultados electorales para descubrir la mejor ruta.

·         La esencia de la buena obra que tanto bien hace, está en las bases fundadoras de justicia social y progreso con equidad; los nuevos paradigmas surgen de ahí.

Tiene gran valor la voz de Roberto Cruz Rodríguez y de quienes dieron tales batallas que afirmaron el sitial ponceño como faro de la patria. Dios ilumine a todos.