El pasado jueves 4 de abril de 2013, comenzó la Convención de la Iglesia
Nuevo Testamento. La Iglesia Nuevo Testamento de Ponce se encuentra en la
esquina de la Calle Villa, frente a la plaza Las Delicias y la Fuente de Los
Leones de la Ciudad Señorial. Por primera vez en su
historia, el Concilio de Iglesias Nuevo Testamento llevó a cabo su Convención
en diferentes lugares de la Isla simultáneamente. Por primera vez en la
historia de Ponce, se tiene una congregación así en la zona de su tradicional y
señorial plaza. Se hace historia y hay una gran semilla.
Ese
jueves 4 de abril, comencé la jornada cenando hamburger “home-made” en “La
Verdadera Casa de las Tías”. Es un excelente restaurante ubicado en la Calle
Isabel número 46. Gracias a la gran familia de La Casa de las Tías por
crear un ambiente único. Ahí, ante las grandes
anfitrionas que son Wilda y Graciela, el atento personal, las manos artesanales
en la cocina y el arte de Antonio Martorell, no dudo que todos sentimos
serenidad en tan buen oasis de dones que obran, buena voluntad e inspiración.
En esa ruta del pasado fin de semana:
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La Convención
comenzó el jueves 4 de abril y se contó con la visita de los obispos Alex
D’Castro y Ephraim Rivera; brilló el mensaje de que el bienaventurado está en
línea con el Señor y su vida está ordenada por la Palabra. Se afirmó que
hombres y mujeres bienaventurados transforman una ciudad y todo lo que hacen
prosperará.
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El viernes 5 de
abril se contó con la visita del obispo David Barlock y su esposa Jill; brilló
el mensaje de que Dios nos da una promesa y muchos problemas vienen después,
pero si perseveramos y creemos, veremos el cumplimiento. Se afirmó que el 2013
es el Año de la Promesa.
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El sábado 6 de
abril se contó con la visita del pastor Richie Ray y su esposa Angie. Uniendo
el mensaje con toques de humor único, vivencias con la espontaneidad que llega
al entendimiento, y la música que estableció precedentes, el pastor Richie Ray
compartió su testimonio de nueva vida, de cómo hay que vivir lo espiritual para
comprenderlo, de cómo Bobby Cruz y él lograron superar ataques al entregarse al
Señor y buscar desarrollar unos ritmos que llevarán las Buenas Nuevas al
pueblo, de que nunca es demasiado tarde para rectificar la ruta, y de cómo en
el Señor se logra el verdadero gozo y paz, de todo corazón y conciencia. Se
evidenció que en el Señor, se alcanza la real y mejor armonía en la existencia.
Ayer domingo 7 de abril la Convención en Ponce CERRÓ EN
GRANDE. Se contó con la visita del pastor Javier Acosta, quien junto a su
esposa Lori pastorea en “Christian Life Mission of Miami”. El pastor Acosta
destacó en su mensaje la perseverancia; que quienes perseveran no quieren
inspirar lástima, sino que vean que la gloria de Dios está en sus vidas. Afirmó
que la perseverancia es mantener el propósito a pesar de las dificultades. Dijo
también: “No vas a perseverar en una relación superficial con Dios”. Exhortó a
transformar la obstinación para que sea determinación, ya que la obstinación es
de uno y la determinación es de Dios.
Esa ruta de fe, edificación y poder
trascendente, me lleva a recordar que para este servidor, en “La Casa de las
Tías”, es inevitable meditar y me preguntarme qué expresaría doña Inés María
Mendoza de Muñoz Marín en tan especial ambiente. Porque Dios emplea los medios
que Él desea para responder y edificar, pienso que mucho de Él se puede
encontrar en escritos, crónicas y reflexiones de doña Inés.
Siguiendo ese
razonamiento, es inevitable preguntarme qué expresaría la alcaldesa Carmen
Yulín en tan especial ambiente. Porque Dios emplea los medios que Él desea para
responder y edificar, pensaba que mucho de Él se puede encontrar en acciones y
mensajes de Yulín, por lo que la bendigo. Dios se creció al crear a la mujer.
Es notable la acción de gracias al Señor, a los pastores
y líderes del Concilio, a invitados y congregación, y a todos los que tomarán
los adelantos de la Convención 2013 como punto de partida para seguir en ruta
ascendente de crecimiento, restauración, edificación y consagración.
La Victoria de la Convención marca
un comienzo. Sea y llegue esta invitación a considerar a la Iglesia Nuevo
Testamento de Ponce como gran lugar de congregación, como positiva llamada a
renacer en tiempos retadores. En esa línea, es propio bendecir a toda
congregación de creyentes y a toda alma perseverante, ya que el cristianismo no
es religión, sino rumbo y sentido de vida.
Al aceptar que Jesús fue y es
revolucionario, entonces
ser “cristiano” es ser creyente; lo que infunde una naturaleza revolucionaria
al palpitar, al ver, creer, pensar y hacer. Hay real cristianismo en la lucha por la
justicia, la equidad y la sana convivencia, la paz integral y la igualdad
humana. Hay vivo cristianismo en nuestras más puras y consagradas esencias de
pueblo. Se puede dar santidad a cada día de vida. Dios ilumine y potencie a todos,
hoy y más allá.
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