La
ciencia establece que hay factores genéticos que influyen en la homosexualidad.
Sin embargo, la Biblia establece que la homosexualidad es PECADO. Veamos:
·
Levítico 18:22:
“No te echarás con varón como con mujer, es abominación.”
·
Levítico 20:13:
“Si alguno se ayuntare con varón como con mujer, abominación hicieron: ambos
han de ser muertos; sobre ellos será su sangre.”
·
1ª Corintios
6:9-10: “¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis;
ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni
los que se echan con varones,”
·
Romanos 1:26-28:
“Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aún sus mujeres
cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza, 27y de igual modo
también los hombre, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su
lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y
recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío. 28Y como ellos no
aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para
hacer cosas que no convienen”.
Mediante
el diálogo sincero y la buena voluntad, se puede adelantar mucho bien. Todos
habitamos en la misma Isla.
La
homosexualidad es clara y contundentemente rechazada en la Biblia. Sin embargo,
no es el único pecado que rechaza la Biblia y como muestra, basta con ver los
10 mandamientos. ¿Cuántos pecados mayores se disfrazan y ocultan?
Se puede
lograr validar el rol de la autoridad civil de hacer valer los derechos de
todos los habitantes indistintamente de su credo religioso, y también se puede
validar el respeto a la autoridad religiosa de orientar y no verse obligada a
aceptar lo contrario a preceptos sagrados.
La clave
es el respeto a la dignidad humana; lo que propicia dar luz para superar todo
pecado y crecer en armonía. La mejor prédica se fundamenta en reconocer el
derecho de todos a su Damasco, y el deber de constante introspección para que
en el liderato consagrado no caiga en el desvío de lo que agrada al Altísimo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario